2 tazas de base de jabón de glicerina transparente o blanca (disponible en tiendas de artesanía o en línea)
2 cucharadas de aceite vegetal (aceite de oliva, aceite de coco, aceite de almendra, etc.)
20-30 gotas de aceite esencial de tu elección (lavanda, eucalipto, rosa, etc.)
Colorante natural (opcional) - puedes usar polvo de remolacha, cúrcuma, espirulina, arcilla u otros colorantes naturales
1. Corta la base de jabón de glicerina en trozos pequeños para facilitar la fusión. Cuanto más pequeños sean los trozos, más rápido se derretirán.
2. Coloca los trozos de jabón en un recipiente apto para microondas o en una olla pequeña para derretirlos al baño maría.
3. Si utilizas el microondas, calienta el jabón en intervalos de 30 segundos, revolviendo cada vez, hasta que esté completamente derretido. Si utilizas el baño maría, calienta el agua a fuego medio y coloca el recipiente con los trozos de jabón encima, revolviendo constantemente hasta que se derrita por completo.
4. Una vez que el jabón esté derretido, agrega el aceite vegetal y mezcla bien. El aceite vegetal añadirá propiedades hidratantes y suavizantes al jabón.
5. Agrega las gotas de aceite esencial de tu elección para dar aroma al jabón. Puedes ajustar la cantidad según tu preferencia de fragancia.
6. Si deseas agregar color al jabón, puedes incorporar un colorante natural en polvo como la remolacha, la cúrcuma, la espirulina o la arcilla. Agrega el colorante poco a poco, revolviendo constantemente, hasta obtener el tono deseado.
7. Vierte la mezcla en moldes de jabón. Puedes usar moldes de silicona o recipientes de plástico flexibles.
8. Deja que el jabón se enfríe y se endurezca por completo. Esto puede llevar varias horas o incluso hasta un día, dependiendo del tamaño y grosor del jabón.
9. Una vez que el jabón esté completamente sólido, desmóldalo con cuidado si es necesario y déjalo reposar durante unos días para que se endurezca por completo.
10. ¡Ahora tienes tu propio jabón de baño natural hecho en casa! Utilízalo como lo harías con cualquier otro jabón de baño.
Recuerda que esta receta es una base y puedes personalizarla según tus preferencias añadiendo ingredientes adicionales como avena molida, miel, aceites esenciales específicos o hierbas secas. ¡Diviértete experimentando con diferentes combinaciones y disfruta de tu jabón de baño casero!