1 bolsa de té de manzanilla o 1 cucharadita de flores de manzanilla secas
1 cucharadita de flores de lavanda secas
1 taza de agua caliente
Miel (opcional, para endulzar)
Calienta una taza de agua hasta que esté a punto de hervir.
Coloca la bolsa de té de manzanilla o las flores de manzanilla y las flores de lavanda en una taza.
Vierte el agua caliente sobre las hierbas en la taza.
Cubre la taza y deja que las hierbas se infusionen durante aproximadamente 5 minutos.
Retira la bolsa de té o cuela las hierbas si las has utilizado en su forma seca.
Si lo deseas, puedes endulzar la infusión con miel, pero es opcional.
Bebe la infusión lentamente y disfruta de su aroma y sabor relajantes.
Tanto la manzanilla como la lavanda son conocidas por sus propiedades relajantes y pueden ayudar a reducir la ansiedad. La manzanilla también puede ayudar a mejorar la calidad del sueño.