Desayuno: Avena cocida con frutas frescas y nueces.
Almuerzo: Ensalada de garbanzos con espinacas, tomates y aguacate.
Cena: Tofu al curry con brócoli y arroz integral.
Desayuno: Batido de espinacas, plátano y leche de almendras.
Almuerzo: Sopa de lentejas con verduras.
Cena: Ensalada de quinua con verduras asadas y aderezo de limón.
Desayuno: Tostadas integrales con aguacate y tomate.
Almuerzo: Estofado de vegetales con calabaza y garbanzos.
Cena: Tacos de champiñones con tortillas de maíz y guacamole.
Desayuno: Yogur de soja con bayas y nueces.
Almuerzo: Ensalada de col rizada con garbanzos y aderezo de tahini.
Cena: Stir-fry de tofu con brócoli y zanahorias sobre arroz integral.
Desayuno: Batido de plátano, espinacas y fresas.
Almuerzo: Sopa de tomate casera con una ensalada verde.
Cena: Berenjenas rellenas de quinua y verduras.
Desayuno: Avena cocida con plátano y canela.
Almuerzo: Ensalada de garbanzos con pepino y pimientos.
Cena: Curry de lentejas con espinacas y arroz integral.
Desayuno: Tostadas integrales con mantequilla de almendras y rodajas de manzana.
Almuerzo: Ensalada de pasta integral con tomates secos y espinacas.
Cena: Tacos de aguacate con frijoles negros y pico de gallo.
Desayuno: Batido de espinacas, plátano y leche de almendras.
Almuerzo: Sopa de guisantes con espinacas.
Cena: Espárragos a la parrilla con patatas asadas y quinua.
Recuerda reducir la cantidad de sal en tus comidas y elegir alimentos bajos en sodio.